sábado, 17 de marzo de 2007

El niño al que se le murió el amigo

El niño al que se le murió el amigo, un microcuento de Ana María Matute...

Una mañana se levantó y fue a buscar al amigo, al otro lado de la valla. Pero el amigo no estaba, y, cuando volvió, le dijo la madre: "El amigo se murió. Niño, no pienses más en él y busca otros para jugar." El niño se sentó en el quicio de la puerta, con la cara entre las manos, y los codos en las rodillas."Él volverá", pensó. Porque no podía ser que allí estuviesen las canicas, el camión y la pistola de hojalata, y el reloj aquel que ya no andaba, y el amigo no viniese a buscarlos. {...}
El niño se levantó del quicio y se fue en busca del amigo.{...} Pasó bucándole toda la noche. Y fue una larga noche casi blanca, que le llenó de polvo el traje y los zapatos. Cuando llegó el sol, el niño, que tenía sueño y sed, estiró los brazos y pensó: "Qué tontos y pequeños son esos juguetes. Y ese reloj que no anda no sirve para nada".Lo tiró todo al pozo, y volvió a la casa, con mucha hambre. La madre le abrió la puerta, y dijo:"Cuánto ha crecido este niño, Dios mío, cuánto ha crecido". Y le compró un traje de hombre, porque el que llevaba le venía muy corto.

Ana María MATUTE: Los niños tontos

1 comentario:

Anónimo dijo...

Precioso cuento el de Ana María Matute, también llamada Carmen Martín Gaite...

Me queda pendiente poner a mí el de Gabriel García Márquez...Y a ver si damos con alguna antología de micocruentos que haga las delicias de nuestra incomprensión.
Pues nada, oye.

Ósculos.

Agur.